El sorprendente efecto secundario del botox en el cerebro
En la sociedad actual, la imagen y la apariencia fisica se han convertido en una obsesion cada vez mas comun. De ahi la proliferacion de tratamientos y productos cosmeticos, entre ellos, el popularisimo botox.
Con el nombre cientifico de toxina botulinica, esta sustancia es una neurotoxina de origen natural producida por la bacteria Clostridium botulinum, que aparece en alimentos mal conservados y produce intoxicaciones alimentarias.
Un veneno con efectos terapeuticos
El mecanismo de accion de la toxina botulinica se basa en su capacidad para bloquear la liberacion de acetilcolina, un neurotransmisor esencial para la contraccion muscular. Como resultado, el musculo se relaja temporalmente y pierde su capacidad de producir contracciones involuntarias o espasmos.
En medicina estetica, este efecto paralizante se utiliza para reducir las lineas de expresion.
A pesar de que su uso esta asociado a –en ocasiones desafortunados– retoques esteticos, el botox tambien se emplea para combatir diversos trastornos, incluyendo espasmos musculares, migrañas cronicas, incontinencia urinaria y sudoracion excesiva, entre otros muchos. Esta, por tanto, considerada como una sustancia segura y efectiva cuando es administrada por un profesional.
Sin embargo, un reciente estudio de la Universidad de Irvine (California) sugiere un sorprendente efecto secundario del botox sobre el procesamiento de las emociones. Su origen estaria en los mecanismos mas basicos que emplea el cerebro para reconocer las expresiones de las personas que nos rodean.
El valor de las microexpresiones
Sin la mediacion de la palabra y simplemente empleando un variado repertorio de muecas, sonrisas, ceños fruncidos, pestañeos y gestos oculares, se pueden comunicar un sinfin de emociones, como el miedo, la ira, la tristeza y la felicidad. Tambien informacion social y de estatus, como la sumision o la agresion.
De esta forma, las expresiones faciales –especialmente las microexpresiones, que duran solo una fraccion de segundo– pueden revelar emociones a nuestros interlocutores incluso antes de que sepamos conscientemente que sentimos.
Pero ¿que sucede si se reduce nuestra capacidad de gesticular? Claramente podriamos pensar en un obstaculo para comunicarnos. Esto se puso de manifiesto durante la pandemia de covid-19, cuando el uso generalizado de mascarillas repercutio negativamente en la calidad de las interacciones sociales.
De igual forma, el botox disminuye la movilidad de los musculos faciales, limitando nuestra capacidad para expresar emociones de manera natural y completa.
Hasta aqui todo parece tener sentido, pero es que ademas el mencionado trabajo describe un asombroso efecto en la facultad de la persona que recibe la toxina botulinica para reconocer e interpretar las emociones de los demas.
¿Y que ocurre si no podemos fruncir el ceño?
Para comprender como nuestros propios gestos afectan a la interpretacion emocional, los investigadores midieron la actividad cerebral en 10 mujeres de entre 33 y 40 años a las que se inyecto botox para inducir paralisis temporal del musculo responsable de fruncir el ceño, conocido como musculo glabelar.
Los investigadores registraron la actividad cerebral de estas voluntarias mientras observaban imagenes de rostros que mostraban distintas emociones (alegria, tristeza, enfado, etc.) antes y despues de recibir el tratamiento. Inesperadamente, los resultados mostraron cambios en la actividad de la amigdala, una region cerebral clave para reconocer e interpretar las emociones.
¿Como es esto posible? Los autores del trabajo sugieren que restringir nuestras propias gesticulaciones podria dificultar la llamada retroalimentacion facial. Segun esta teoria, cuando vemos una cara enfadada o feliz, contraemos o flexionamos los musculos correspondientes para recrear la expresion y ayudarnos a identificar la emocion reflejada.
Entonces, la prevencion del ceño fruncido con el botox impediria la formacion de estas microexpresiones, afectando al procesamiento de las caras emocionales.
El estudio aporta nuevas evidencias a una creciente linea de pensamiento que sugiere que la inhibicion de la contraccion del musculo glabelar altera la actividad neural implicada en el procesamiento emocional. Ademas, estos resultados nos ayudan a comprender mejor como interpreta el cerebro las emociones.
La capacidad de leer correctamente los gestos de los demas es esencial para la comunicacion y la interaccion social efectivas. Hasta el punto de que los defectos en el reconocimiento de la expresion facial son considerados uno de los principales sintomas de los trastornos sociales, como el autismo.
Noticias relacionadas
Los problemas para interpretar las señales sociales pueden dificultar el establecimiento de relaciones y la construccion de una red social solida. Aunque se necesita mas investigacion para confirmar los hallazgos y comprender mejor el papel del botox en la interpretacion de las emociones, es importante sopesar sus posibles (e inesperados) efectos secundarios a la hora de considerar someterse a este tipo de tratamientos.
Este articulo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.
Fuente: www.mmmedicalpr.com